Tratamiento de refuerzo después de la ortodoncia
¿Qué es la terapia de refuerzo?
El tratamiento de ortodoncia consta de dos etapas sucesivas como tratamiento activo y tratamiento pasivo.
En tratamiento activo; brackets, alambres, elásticos intraorales, aparatología extraoral, etc. se aplica fuerza a los dientes y (si es necesario) a las mandíbulas, creando así movimientos a nivel dental y esquelético. Teniendo en cuenta que los dientes y los maxilares están colocados en la posición ideal, se retiran los brackets de la boca del paciente y se finaliza el tratamiento activo.
Dado que los dientes se mueven durante el tratamiento de ortodoncia, se requiere un cierto período de tiempo para que el hueso y los tejidos circundantes se adapten a la nueva posición de los dientes.
Lo que llamamos terapia de refuerzo cubre exactamente este proceso de adaptación.
Al final del tratamiento activo, la tendencia de los dientes a volver a su estado original es bastante alta. Por lo tanto, si los dientes se dejan solos sin tomar ninguna precaución después de retirar los frenos, los dientes comenzarán a volver a su estado original en poco tiempo.
Para evitar esta reversión, conservar el estado actual de los dientes y evitar su deterioro, es necesario el uso de aparatos de retención durante el tiempo que el médico considere oportuno.
Tratamiento de refuerzo Placa Essix (aparatos transparentes móviles), Retenedor lingual (alambre fijador adherido a la parte posterior de los dientes), Aparato Hawley, etc. Aunque se realiza con aparatos como los dientes, en este proceso no se aplica fuerza activa a los dientes, solo se pretende mantener las posiciones actuales. Si se presta suficiente atención al tratamiento de refuerzo y se siguen las recomendaciones del médico, los dientes se adaptarán a sus nuevas posiciones en el hueso y se evitará el deterioro de los dientes.
¿Cómo se mueven los dientes?
Los dientes no se fijan en la mandíbula de la misma manera que se clava un clavo en la madera. Entre los dientes y el hueso hay un espacio llamado espacio periodontal, y en este espacio hay fibrillas delgadas que conectan los dientes con el hueso. Las fibrillas invisibles, que llamamos ligamento periodontal, permiten que los dientes se coloquen en una posición flexible y móvil dentro del hueso.
Los alambres especiales de aleación de Ni-ti se utilizan en el tratamiento de ortodoncia. La peculiaridad de estos alambres es que son flexibles y deben tener una memoria que volverá a su forma anterior por mucho que se doblen. Los citados alambres se fijan a los dientes por medio de los brackets fijados a los dientes, y el alambre, que intenta volver a su estado original, desplaza los dientes hacia el punto en el que deben estar, tirando del diente hacia sí mismo. A veces, los dientes se pueden mover en la dirección deseada con neumáticos especiales fijados a los soportes.
Hospitalario Bagcilar
Dt. Principio ELGUN
